¡Deja de hacer esto si quieres aprender inglés!

Sabemos que cuando queremos aprender una nueva habilidad, nos rodean de consejos de cómo alcanzar esa meta. Sin embargo, hoy te queremos traer algunos consejos que te ayudarán a identificar y superar aquellos hábitos negativos que pueden estar entorpeciendo tu aprendizaje del inglés.

Aprender un nuevo idioma es una tarea desafiante, pero no imposible. Muchas veces, sin darnos cuenta, adoptamos conductas y actitudes que ralentizan nuestro progreso. Hoy queremos proporcionarte algunas herramientas y estrategias necesarias para eliminar esos obstáculos y avanzar con confianza en tu camino hacia la fluidez en inglés.

Procrastinar

Sabemos que esto se repite hasta el cansancio, pero es cierto que si empiezas a postergar continuamente el estudio del idioma y la práctica necesaria para aprenderlo y perfeccionarlo, te tomará más tiempo alcanzar tu objetivo. Esta demora inevitablemente terminará convirtiéndose en frustración que te impide avanzar.

Traducir al inglés

Traducir todo desde tu idioma nativo al inglés (O viceversa) puede ralentizar tu progreso. Sabemos que el traductor es una muy buena herramienta cuando estás iniciando, pero si ya llevas un buen tiempo aprendiendo inglés, no deberías depender excesivamente de esta herramienta.

En este punto, deberías ser capaz de usar tu propio vocabulario para entender y usar palabras nuevas en inglés por su contexto o por su significado, no por su equivalente en español. Esto te ayudará a pensar y expresarte directamente en inglés, mejorando tu fluidez y comprensión del idioma.

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Estudiar en desorden

No tener un plan de estudio claro y organizado puede hacer que tu aprendizaje sea menos efectivo. Saltar de un tema a otro sin un enfoque claro puede causar confusión y desmotivación. Es fundamental establecer una rutina de estudio con objetivos específicos y alcanzables que tengan en cuenta tu nivel y te permita medir tu progreso.

Por lo anterior, es necesario:

Establecer Metas claras, aquí, deberás Definir lo que quieres lograr a corto, mediano y largo plazo; crear un Horario de estudio, que te permita dedicar tiempos específicos del día o de la semana para estudiar inglés. La consistencia es la clave. Un enfoque organizado te ayudará a avanzar más rápido, y, hará que el proceso de aprendizaje sea más gratificante y menos frustrante.

No practicar inglés

No practicar regularmente el inglés, ya sea hablando, escuchando, leyendo o escribiendo, limita significativamente tu capacidad para mejorar. A veces, cuando estamos en clases de inglés, creemos que solamente nuestra presencia y participación en clase es suficiente.

Sin embargo, el trabajo fuera de clase y de manera autónoma es fundamental. Si realmente quieres avanzar, es necesario que te apropies de tu proceso y vuelvas de tu vida cotidiana una constante práctica del idioma; Escucha, lee, habla y escribe, desarrolla tus habilidades y amplía tu vocabulario de manera autónoma.

Miedo a cometer errores en inglés

El temor a equivocarse puede impedirte hablar y practicar inglés. Este miedo puede hacer que evites situaciones donde podrías aprender y mejorar tu inglés. Es importante recordar que cometer errores es una parte natural del proceso de aprendizaje.

Cada error es una oportunidad para aprender y mejorar. Y cada vez que te equivoques debes verlo como un error menos que cometerás en el futuro, porque habrás aprendido. Persiste y no desistas, hasta que notes los avances y te sientas bien con tu proceso.

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Aprender inglés todo un reto

Aprender un nuevo idioma es un viaje desafiante, pero sumamente gratificante. Es esencial reconocer que el proceso requiere esfuerzo constante, práctica y una mentalidad abierta para aceptar y aprender de los errores.

Recuerda, la procrastinación y la falta de práctica son enemigos del progreso. Debes establecer un plan de estudio claro, ser organizado y no depender excesivamente de la traducción.

Finalmente, es importante aceptar los errores como parte natural del aprendizaje y busca continuamente nuevas formas de integrar el inglés en tu vida diaria. Además, no olvides aprovechar los numerosos recursos gratuitos disponibles online que pueden complementar tu aprendizaje autónomo.

Conclusión

El camino hacia la fluidez en inglés no es lineal, y cada persona avanza a su propio ritmo. La clave está en la constancia y la determinación. Con los consejos y estrategias que hemos compartido desde CIA Idiomas, esperamos que puedas identificar y superar los obstáculos que encuentres en tu camino. ¡No te rindas y sigue adelante!

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